viernes, 20 de abril de 2012

Comunicación: ¿corazón o apéndice?




La pregunta viene al caso porque recuerdo que -en tiempos del post título en Recursos Humanos- aún se hablaba de la comunicación como una competencia. Es decir, se reconocía que la virtud de un buen comunicador era un factor diferenciador de éxito de cualquier profesional que sobresalía de la media. Y se aceptaba que alguien podría ser “un excelente técnico” prescindiendo de este apéndice que, aunque valioso, no era imprescindible para su desempeño.


Los días que corren vienen con la certeza de que, sin la competencia comunicadora, se pierden las competencias técnicas, gerenciales, administrativas y mucho más aquellas relacionadas con lo que quiere significar el liderazgo.


En pocas palabras: ser un buen comunicador es condición sine qua non para desempeñarse en cualquier actividad. Se trata del principal músculo que le da movimiento a todas nuestras otras competencias: el corazón.


Y así, como cuidamos el corazón, en tanto su funcionamiento compromete la vida, debemos cuidar la comunicación ya que su insalubridad nos coloca en peligro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...