Entre los métodos que nos dan información acerca del clima de una
organización, el menos sofisticado pero el más expedito y espontáneo es la
conversación.
Y cuando digo conversación, no me refiero a procurar un diálogo
para saber qué opinión le merece al interlocutor los asuntos que constituyen el
clima de la organización. (Eso determina -en cierta medida- la respuesta.)
Digo conversación y me refiero a escuchar con todos los sentidos y
sin prejuicios uno de esos diálogos que se dan con naturalidad entre los
miembros o vinculados de una empresa. Es decir, me refiero a escuchar.
Así, sin expectativas, atender las palabras verbales y no verbales que van y vienen en el comedor, alrededor de un café, un tereré, un mate.
Por su puesto, con escuchar una, dos o tres conversaciones no se
podrán sacar elementos concluyentes para tomar decisiones en consecuencia. Sin
embargo, obtendremos una muestra pura y espontánea de aquello que constituye el contenido de las
comunicaciones informales. Y ese contenido también es muy valioso para darle
vida a las pautas y a los relatos de los medios de CI´s.
Siempre que leo una nueva entrada quedo con ganas de mas, jajaja. execelente blog Pamela. saludos
ResponderEliminarGracias, Ney. Un placer que pases con frecuencia por aquí. Un abrazo. P.
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